Güler se exhibe en la Eurocopa, pero Países Bajos está en semifinales

Bernabeudigital.com

Nervios y muchísima tensión la que se respiraba en el Países Bajos - Turquía. Era el último partido de cuartos de final de la Eurocopa... y en el estaba Arda Güler. El futbolista del Real Madrid partía, a priori, como falso '9', dejando claro que puede jugar en todas las posiciones del frente del ataque. En frente, eso sí, no estaba Austria, sino una selección que fue de lo mejor en los octavos de final del torneo. Xavi Simons, Gakpo, Van Dijk... mucha calidad tenían los 'oranje' sobre el verde de Berlín.

Desde el himno los turcos mostraron salir a por todas al partido. Era la primera vez en unas cuantas ediciones que no pisaban unos cuartos de final de la Eurocopa. Querían acceder a las 'semis' con Arda Güler a la cabeza. El madridista se sabía importante hoy y lo quería confirmar de nuevo con una actuación estelar. En semifinales esperaba la Inglaterra de Jude Bellingham.

LA PASIÓN TURCA

En los primeros minutos se vio lo que iba a ser el partido. Países Bajos encontraba muy fácilmente a sus delanteros, mientras que Turquía suspiraba con la firme intención de salir al contragolpe con las máximas garantías. Güler jugaba por donde quería, algo que era de prever teniendo en cuenta que es el jugador con más calidad del equipo pese a su precocidad.

Más allá de buscar el contraataque, Turquía defendía con el valor que se le acredita a los mejores guerreros. Todos remaban en la misma dirección y verlos defender en Berlín erizaba la piel de los más fríos. No solo eso, es que los turcos se vinieron arriba y acorralaron a los Países Bajos en su campo. Fue ahí, donde Montella frotó la lámpara y salió el genio de Arda Güler. Esta vez fue con la derecha, pero puso un centro medido para que Turquía estuviese más cerca de las 'semis' con el 0-1. Este chico es realmente bueno y pide paso tanto en Turquía como en el Real Madrid. Anotó, por cierto, el central Akaydin.

GÜLER ES MAGNÍFICO, PERO NO FUE SUFICIENTE

Tras el descanso, Países Bajos cambió su dibujo para inquieta a los defensores turcos. Weghorst fue el encargado de llevar a cabo esa tarea. Al principio se notó y mucho, de hecho los turcos pasaron mucho tiempo replegados en su área. En cuanto se quitaron los nervios después del descanso, Arda Güler salió a su rescate. Jugando de falso '9', de extremo, de interior... de todocampista, en definitiva. Un disparo de falta desde más de 30 metros acabó en el palo. Quería el 0-2 y lo quería ya.

Turquía defendía con todo y atacaba a través de Güler. Ese era el plan de Montella y le estaba saliendo bien hasta que De Vrij puso el 1-1 en el marcador a 20 minutos del final. Otro tanto de cabeza, por supuesto. Solo cinco minutos después, Cody Gakpo puso el 2-1 en el marcador tras otro fallo de la defensa turca. La gesta turca debía tener tintes de épica.

Lo estaban intentando hasta la saciedad, pero siempre aparecía un defensor o el portero de Países Bajos para arruinar el empuje turco. El pitido final certificó el cara a cara de los neerlandeses contra la Inglaterra de Jude Bellingham.