Camavinga, cazado en el último entrenamiento del Real Madrid

Después de un desafortunado lance con Aurélien Tchouaméni en el entrenamiento previo a la Supercopa de Europa en Varsovia, Eduardo Camavinga sufrió un esguince en el ligamento colateral interno de rodilla izquierda. El pronóstico en aquel momento fue de dos meses, y de momento solo han transcurrido dos semanas y media. Sin embargo, el físico privilegiado del futbolista francés del Real Madrid podría hacerle volver antes de lo esperado.

Jorge Picón, periodista de Relevo, desveló el pasado viernes que Camavinga está mejorando favorablemente y a pasos agigantados de su lesión de rodilla, y que ya incluso corre a baja intensidad y podría empezar a tocar balón después del parón de selecciones de la próxima semana. Concretamente, el 2 de septiembre comienza el parón hasta el día 10, y a partir de entonces, el mediocentro galo podría comenzar a entrenarse, con precaución y en solitario, haciendo ejercicios con la pelota.

CAMAVINGA, CAZADO EN EL ÚLTIMO ENTRENO DEL REAL MADRID

Este sábado, en el último entrenamiento antes del Real Madrid - Betis, no se le esperaba por Valdebebas; sin embargo, Camavinga se ha dejado ver, observando a sus compañeros desde un banquillo anexo al campo donde se ha entrenado el equipo. Durante la sesión, el centrocampista ha salido de pronto del interior de las instalaciones y se ha sentado solo a contemplar el trabajo del resto de la plantilla merengue. Síntoma de la ganas del francés por reincorporarse al grupo.

Camavinga, observando a sus compañeros durante el entrenamiento

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— Bernabéu Digital (@BernabeuDgt) August 31, 2024