Barcelona 90-97 Real Madrid: victoria épica con un Campazzo estratosférico
El clásico empezó de forma muy intensa, con unos primeros puntos para el Barcelona, a lo que respondió rápidamente Xavier Rathan-Mayes con un buen triple. Le siguió Edy Tavares con una bandeja bajo canasta, y es que el ataque del Real Madrid fue muy fluido y efectivo. El escolta canadiense siguió con su buen hacer, y es que anotó un tiro exterior más. Mario Hezonja entró bien al partido sin nervios y con una bandeja a aro pasado muy bonita. Y tras el tiempo muerto solicitado por Joan Peñarroya más allá del ecuador del primer cuarto, la contienda se convirtió en un festival de posesiones cortas y lanzamientos rápidos, sobre todos de un inspirado Jan Vesely desde cinco metros. Así, los culés casi igualaron el marcador, pero fue insuficiente, ya que los de Chus Mateo acabaron por delante.
Diferente fue este segundo cuarto, ya que los culés comenzaron arrasando en estos tres primeros minutos, y el Real Madrid erró varios lanzamientos claros. La defensa propuesta por Chus Mateo no fue la mejor, y el ataque no tuvo nada que ver con respecto al primer periodo, y ahí se cayó el equipo blanco. Fue Dzanan Musa quien cortó el mal parcial de los madridistas con un triple desde la esquina, aunque no fue suficiente. Y el encuentro siguió por este cauce, con un ida y vuelta constante, múltiples errores y posesiones extremadamente malas. El parcial, por hacerse a una idea rápida, fue favorable a los de Peñarroya por más de diez puntos.Y llegó el descanso con una imagen muy mala de los capitalinos, que no eligieron bien ninguna selección de tiro.
Tras el descanso todo siguió igual, ya que el Real Madrid tomó malas decisiones en ataque, y Tavares no estuvo muy acertado. Por si fuera poco, Hezonja falló un triple solo desde la esquina para igualar el marcador, y la segunda unidad de los blancos ni estuvo ni se le esperó. Al menos, el croata se rehizo de su error anterior para anotar un dos más uno completo. El '11', aunque errase algún lanzamiento, le entró el picorcillo y lanzó con acierto tres seguidos, por lo que la mayoría de las posesiones fueron para él, y demostró su elegancia en cada suspensión para acercar a los suyos en el electrónico. Aun así, y pese a su exhibición, los tiros clave para ponerse por delante no entraron, pero fue suficiente para mantener la corta renta.
Para los últimos diez minutos, Tavares comenzó haciéndose poderoso en la zona, y el caboverdiano pudo realizar grandes jugadas para mantener al Real Madrid por delante. Y muy igualado se volvió el partido con un lanzamiento de tres de Vesely, pero Alberto Abalde respondió para acallar el Palau por completo. El pívot blanco también se sumó a esta contra ofensiva blanca, y puso los cuatro de ventaja gracias a una buena acción debajo del aro. Pese a ello, la magia de Kevin Punter hizo regresar al partido al Barcelona con tres tiros libres algo discutibles, aunque Hezonja no se rindió y forzó un salto entre dos que no ganó pese a que fuese falta anterior. La Magia del Palau, aquel ente que siempre corrompe cada partido, intentó impedir una vez más que el Real Madrid ganase, aunque Campazzo tuvo lo que había que tener para mandar el partido a la prórroga con un triple espectacular a falta de un segundo.
PRÓRROGAS MUY INTENSAS
La prórroga comenzó con una bandeja bajo el aro de Tavares, a lo que le siguió una suspensión con fortuna de Gabriel Deck, desaparecido hasta el momento. Intensa desde el primer momento, fue un no parar en cada posesión, y dos tiros libres regalados hacia el caboverdiano terminaron con un punto más anotado por parte del pívot, y se le sumó el argentino con otro más. Pese a ello, Punter destapó el tarro de las esencias para anotar un triple muy complicado y poner por delante a los suyos. Campazzo, otro que tal, sumó su punto número 13 con una bandeja muy importante, mientras que el trío arbitral se inventó una falta hacia el '0' culé, otra más. Falló un lanzamiento desde cinco metros, y Musa hizo lo mismo con una bandeja para ganar, y el encuentro se fue a otra prórroga.
Dentro de la segunda prórroga, el Barcelona se puso por delante, mientras que el Real Madrid comenzó mucho peor que en la primera. Hezonja fue el que anotó para igualar, mientras que el trío de naranja hizo su trabajo en favor de los catalanes con sus faltas inexistentes, y fue Tavares quien cerró el aro en la ofensiva tras un error de Deck en la entrada. Parker anotó su triple, mientras Campazzo sumó desde el tiro libre, aunque lo importante era realizar una defensa para anotar en la siguiente posesión. Hezonja sumó otros dos con un lanzamiento a asistencia del argentino, que remató el encuentro con una bandeja tras romper a Justin Anderson con una habilidad altísima. La victoria fue blanca, y de mucho mérito al final.