Mucha fuerza, bestia
El pasado sábado, el deporte volvió a mostrar su cara más amarga. Con todo ya decidido, a falta de apenas segundos para que terminara el encuentro, Yéremy Pino se cruzaba en el camino de un Dani Carvajal que en lugar del balón terminó despejando la pierna del delantero del Villarreal. Su rodilla derecha hizo un escorzo de lo más antinatural, y las imágenes y los gritos de dolor ya presagiaban lo peor de una lesión que ha acabado cumpliendo los peores pronósticos.
El futbolista del Real Madrid se ha roto el ligamento cruzado anterior, el ligamento colateral externo y el tendón poplíteo de su pierna diestra. Una avería tremenda que le obligará a pasar por quirófano y que le hará perderse lo que resta de temporada. Duro varapalo para uno de los capitanes del conjunto blanco que atravesaba un gran estado de forma, después de un año fantástico en el que incluso ha sido nominado al Balón de Oro.
Por ello, Dani, desde mi humilde escritorio, te envío toda la fuerza del mundo. Esa energía, esa intensidad y esa entrega que muestras en cada partido toca trasladarla ahora en una recuperación que será larga, a ratos frustrante, pero de la que saldrás mucho más fuerte. El madridismo te esperará, capitán. Mucho ánimo en este camino, que no recorrerás solo. Eres un gladiador y tienes a todo un ejército de madridistas detrás, apoyándote. Volverás invencible, BESTIA.
Por cierto, a la directiva: toca renovar ya el contrato de Carvajal. Este infortunio no debe cambiar nada y los planes de renovación han de continuar. Merece que se le espere.