Esta Liga es un infierno: la crónica del Valencia 1-0 Real Madrid
El Real Madrid cae ante el Valencia por 1-0 (Diego López) y consuma su segunda derrota consecutiva en una semana nefasta. Los blancos entregaron la primera parte y perdonaron en una segunda mitad que tuvo múltiples interrupciones y en la que Vinicius acabó expulsado.
LA CRÓNICA DEL VALENCIA 1-0 REAL MADRID
Hasta seis rotaciones acometió Ancelotti con respecto al último duelo frente al Manchester City. Courtois, Militao, Vinicius, Benzema y Camavinga -pero como interior- se mantuvieron en el once inicial, mientras que Lucas Vázquez, Rüdiger, Mendy, Tchouaméni y Asensio volvieron a la titularidad. Por su parte, el Valencia salió con Cavani como referencia ofensiva y con los canteranos Diego López y Javi Guerra.
El inicio del encuentro fue vertiginoso, con transiciones rápidas y sin un claro dominador. El balón pasaba de área a área con bastante velocidad. Jugadas cortas y veloces que, sin embargo, no se traducían en ocasiones. Ningún equipo conseguía finalizar ninguna de sus elaboraciones. Sólo un disparo lejano de Diego López inquietó mínimamente a Courtois en los primeros 20 minutos, en los que Mamardashvili no tuvo trabajo, por culpa de las imprecisiones del Real Madrid en tres cuartos de campo.
En torno a la media hora, el conjunto blanco trató de adueñarse de la posesión; pero cuando empezaba a conseguirlo, recibió el mazazo. Chut de Kluivert desde la izquierda que pegó en un defensa y del que se sirvió, a placer, Diego López en el segundo palo, aprovechando el error en la marca de Mendy, para adelantar a los locales. No hubo reacción por parte de los madridistas que no dispararon a puerta. Sólo Vinicius, con un cabezazo en el área pequeña que se marchó alto, metió un poco el miedo en el cuerpo de los ches, quienes, sin embargo, estuvieron muy cerca de marcar el segundo al filo del descanso: Javi Guerra logró meterse hasta la cocina y obligó a Courtois a esforzar al máximo con una doble parada sensacional.
Para la segunda mitad, después del mal rendimiento ofensivo del equipo en la primera, Ancelotti decidió meter a Rodrygo por Camavinga. Y los primeros minutos fueron una repetición del inicio del partido, pero con ocasiones de gol muy claras. En el Real Madrid las tuvieron Asensio, con un disparo con la derecha dentro del área que se marchó desviada, y Rodrygo, cuyo disparo fue repelido por Mamardashvili con un auténtico paradón. En el Valencia, Diego López pudo firmar un doblete, pero su chut con la zurda dentro de la zona de castigo fue despejado por Courtois con una estirada abajo sensacional.
Pasada la hora de juego, Ancelotti trató de calmar un partido que se había convertido en un correcalles y metió en el campo a Kroos y Modric por Ceballos y Asensio. Tras el cambio, Rodrygo dispuso de otra gran ocasión, con un disparo cercano que sacó el portero local con la yema de los dedos. Y minutos después, lo nunca visto: la grada tira un balón al campo; se queda en la frontal del área valencianista; cuando el Madrid pasa al ataque, Comert aprovecha para despejar intencionadamente ese balón hacia la parte izquierda, donde Vinicius encaraba a Foulquier; las pelotas chocan; el árbitro pide opinión al VAR sobre si es penalti e indica finalmente libre indirecto fuera del área. Una decisión que provocó una trifulca entre Vinicius y la grada, a la que se unieron otros jugadores como MIlitao, Rüdiger... Hasta Courtois se recorrió el campo para defender al delantero brasileño que señaló al aficionado que le había insultado. De Burgos Bengoetxea paró el encuentro, pidiendo al delegado de campo que avisase por megafonía para que cesaran los insultos. En total se fueron más de seis minutos.
Tras el parón, el Valencia estuvo cerca de sentenciar a la contra, pero el árbitro anuló el gol de Kluivert por fuera de juego. No obstante, el dominio era madridista. Los ches lo intentaban al contragolpe, mientras aguantaban las acometidas del Real Madrid en el tramo final. Valverde, que entró junto a Carvajal por Lucas y Tchouaméni para los últimos minutos, tuvo una clarísima, pero no precisó. Su disparo, con línea directa hacia gol, le salió demasiado centrado y Mamardashvili pudo despejar casi vencido. Ya en el descuento, Vinicius terminó expulsado después de una tangana en la que los madrileños pidieron penalti por una mano en el área local. Hugo Duro le agarró del cuello por detrás y al intentar zafarse, el brasileño soltó el brazo. Sin embargo, el único amonestado fue el carioca, después de que el árbitro revisara la acción en el VAR. Finalmente, pese a otra clara de Benzema dentro del área que desbarató el portero valencianista, el Real Madrid consumó una nueva derrota ante un Valencia que da un paso de gigante hacia la salvación. La próxima cita de los de Ancelotti será el miércoles contra el Rayo en el Bernabéu.