Puerta grande o enfermería

Estamos ante una situación clave para intentar revertirlo todo a nuestro favor. El Real Madrid necesita un milagro para terminar la temporada de forma más que decente, aunque uno de ellos no lo es tanto puesto que el título está a solo 90 minutos. Necesitamos ganar la final de Copa del Rey no por la importancia del título en sí y para no quedarnos de vacío, sino por el golpe moral que puede haber con ello.

En Barcelona están muy subiditos por estar líderes de LaLiga y haber goleado en los dos clásicos jugados hasta la fecha, pero la realidad es que estamos hablando de una final en la que el Real Madrid es partícipe y eso implica que tenemos el sueño muy vivo de poder dar una estocada a nuestro máximo rival de la que pueden no levantarse. Están soñando con el triplete, pero ¿y si no ganan nada?

UN GOLPE PSICOLÓGICO

El Real Madrid tiene ante sí una oportunidad de oro porque en el hipotético caso de que terminemos logrando esa Copa del Rey, el golpe anímico que se puede llevar el FC Barcelona es enorme, principalmente porque sueñan con el triplete y tienen ante sí unas semanas muy completas que los de Ancelotti pueden aprovechar. Cuando hablamos de puerta grande o enfermería es precisamente por eso, porque ganando este sábado se abre la veda a poder lograr el doblete y salvar la temporada de la forma más digna posible tras la dura eliminación en Champions. Sin embargo, en caso de que se pierda este clásico, estaremos hablando de una situación crítica de la que Carletto ni siquiera tendría opción de recuperación. Esperemos que se dé el primer escenario.