CRÓNICA | Reacción de campeón para domar el Celtic Park
El Real Madrid comienza la nueva temporada de la Champions League igual que terminó la anterior: ¡ganando! Victoria en la primera jornada ante un muy buen Celtic de Glasgow que durante la primera hora le puso muy complicadas las cosas a los madridistas. Sin embargo, un jugadón de Valverde culminado por Vinicius y otra obra maestra de Modric en el 60' pusieron el duelo muy de cara y Hazard en el 76' terminó matando el choque. No obstante, el conjunto blanco se vuelve a Madrid con Benzema y Militao lesionados.
No sorprendió Carlo Ancelotti en la alineación y puso la habitual, su once preferido, el mismo que en la final de París, a excepción del traspasado Casemiro por Tchouaméni. Y bajo la impresionante y maravillosa atmósfera del Celtic Park, los escoceses comenzaron el partido endiablados, provocando errores en la circulación y en la zaga madridista, y elevando el ritmo del encuentro. Tanto que uno de sus avisos, un zurriagazo de McGregor desde la frontal, acabó estrellándose en el poste.
El Real Madrid trataba de domar el partido, pero no encontraba la manera de generar peligro y arrimarse a la portería rival. Y para colmo, después de que Militao estuviera muy cerca de marcarse en propia puerta, Benzema empezó a cojear y quejarse de la rodilla. Fue necesaria su sustitución y Ancelotti optó por meter a Hazard en su lugar. Y el belga protagonizó las dos acciones más peligrosas del conjunto blanco en el primer tiempo: en la primera asistió a Vinicius y le dejó solo ante Hart, pero el brasileño no logró culminar el mano a mano, y después el propio Hazard tuvo una ocasión clarísima en el segundo palo, con todo a favor, pero remató horrible.
La segunda mitad comenzó con otro cambio por lesión, Militao por Rüdiger, y con un Celtic apretando y poniendo nuevamente en apuros a los merengues. Maeda tuvo una acción muy similar a la de Hazard, pero afortunadamente también falló. No obstante, el paso de los minutos empezó a notarse poco a poco en el ritmo de los escoceses. Un bajón que aprovechó el Real Madrid, que con dos zarpazos, después de esperar pacientemente su oportunidad, terminó matando el partido.
Jugadón de Valverde por la derecha, pase fantástico para Vinicius, que esta vez no falló al segundo palo. Y tres minutos después, cumplida la hora de juego, Modric firmó otra obra de arte: tras realizar varios quiebros en el área, el croata tiró de su famoso tiro de exterior para poner el 0-2. Dos goles prácticamente seguidos después de los cuales, el Celtic bajó los brazos. Momento que aprovechó Ancelotti para dar descanso a Tchouaméni y meter a Camavinga.
Posteriormente, el Real Madrid pasó a controlar el encuentro con posesiones largas, como la del tercer gol. Tras varios minutos moviendo la pelota y mucho pases seguidos, Kroos puso un centro maravilloso por alto a Carvajal en el segundo palo, el lateral prolongó metiendo el pase de la muerte a un Eden Hazard que esta vez, sin portero y con todo a su favor, no falló y mató el partido a favor de los merengues.
En el tramo final, Asensio y Rodrygo tuvieron minutos y Courtois su momento de gloria con otro paradón descomunal. Primeros tres puntos de la temporada en Champions League y sexta victoria consecutiva en este inicio de curso para un Real Madrid que sigue imparable. Próxima cita, el Mallorca en LaLiga en el Santiago Bernabéu (domingo 14:00 horas).