CRÓNICA | Benzema is back
Sangre, sudor y lágrimas del Real Madrid para llevarse los tres puntos en el José Zorrilla. Victoria sufrida de los blancos contra un gran Valladolid que aguantó hasta el tramo final, en el que Karim Benzema resolvió el choque con dos goles decisivos y vitales.
El último once del año lo formaron Courtois; Carvajal, Rüdiger, Alaba, Mendy; Kroos, Valverde, Ceballos; Vinicius, Benzema y Asensio. Ancelotti decidió dar descanso a Tchouaméni, Camavinga y Modric; a la vez que dio la oportunidad al utrerano y confió en el balear por delante de Rodrygo. Como curiosidad, el cambio de última hora entre Militao, que sufrió una indisposición, por el austriaco. Sin embargo, en los primeros minutos, el protagonista del partido no fue ninguno de ellos, sino Munuera Montero.
Un centro de Ceballos dentro del área tocó claramente en la mano de Javi Sánchez, impidiendo que Benzema contactara con el balón, pero ni el colegiado jienense ni Gil Manzano desde el VAR consideraron que fuera punible. El Real Madrid estuvo muy volcado en los primeros compases y, además de esa jugada, tuvo otra ocasión clarísima en las botas de Vinicius y Karim. El brasileño obligó a Masip a hacer un paradón tras una buena diagonal, y el rechace lo cazó el francés, que en boca de gol envió el balón a las nubes.
No obstante, la llama madridista fue apagándose. Después de otra jugada polémica entre Joaquín y Asensio, con el balear desestabilizado por el vallisoletano cuando iba a recibir un centro, el Real Valladolid comenzó a espabilar. Tanto que en el último cuarto de hora del primer tiempo fue claro dominador. Los madrileños no eran capaces de salir de presión y dar más de tres pases seguidos, mientras los pucelanos obligaban a Courtois a esforzarse al máximo. Aguado estuvo muy cerca de firmar un golazo desde fuera del área, pero el belga lo evitó con una estirada impresionante. Poco después, el centrocampista blaquivioleta volvió a animarse desde lejos y también estuvo cerca de marcar con un disparo colocado que se fue rozando el poste. Y así, con los locales controlando el juego y amenazando a la defensa madridista, terminó la primera mitad.
Ya en la segunda parte, el Real Madrid recuperó la pelota, pero sin inquietar a Masip. Por su parte, a base de contragolpes, el Valladolid siguió metiendo el miedo en el cuerpo de los madridistas. Ancelotti se vio obligado a meter baza con Rodrygo y Lucas en sustitución de Asensio y Carvajal. Sin embargo, no había manera de superar el muro pucelano, y el peligro continuaba siendo del conjunto local. Sergio León rozó el gol tras cabecear un córner, pero Courtois volvió a aparecer con un paradón magistral.
Pasaban los minutos y el Madrid seguía atascado. Por ello, Carletto intentó agitar un poco el encuentro con Camavinga, que salió en el lugar de Ceballos en el 70'. Y el encuentro se agitó, fruto también del cansancio acumulado de los vallisoletanos. Primero avisó Benzema con un jugadón y un disparo colocado desde la frontal que despejó Masip con una estirada sensacional. Y después, Rüdiger remató un córner y su cabezazo se estrelló en la mano, totalmente despegada, de Javi Sánchez. Esta vez, desde el VAR sí que avisaron a Munuera Montero, que acabó señalando un penalti que convirtió Benzema en el 81', y por el que Sergio León vio la tarjeta roja directa por protestar.
Para cerrar el partido, Ancelotti metió a Modric y a Tchouaméni por Vinicius y Valverde. Pero fue Camavinga, el agitador, el que con una jugada impresionante asistió a Benzema para hacer el segundo y definitivo tanto del encuentro, cerrando así una victoria muy sufrida en Valladolid, de las que terminan valiendo ligas. La próxima cita del Real Madrid será en Copa del Rey, el próximo martes contra el Cacereño.