Güler brilla en el derbi: la crónica del Getafe 0-1 Real Madrid

El Real Madrid afrontaba la visita al Coliseum Alfonso Pérez con la obligación de ganar para mantenerse en la pelea por el título de LaLiga y evitar que el Barcelona se escapara en la cima. Tras la derrota en Champions y con la final de Copa del Rey a la vuelta de la esquina, Ancelotti apostaba por una mezcla de rotación y necesidad, dando minutos a jugadores menos habituales y colocando a Endrick como titular en punta. Enfrente, un Getafe que buscaba certificar su permanencia en Primera División ante su público, en un estadio donde ya había logrado frenar al Barça a principios de temporada.

El técnico italiano no podía contar con Mbappé ni con Carvajal, Militao ni Mendy, todos fuera por lesión. Aun así, el once inicial presentaba un equipo competitivo con Courtois bajo palos, una línea defensiva formada por Lucas Vázquez, Raúl Asencio, Alaba y Fran García, un mediocampo con Tchouaméni, Valverde y Arda Güler, y una delantera con Brahim, Endrick y Vinícius.

GÜLER MUESTRA EL CAMINO

Carlo Ancelotti volvía a una formación que al equipo le sienta mucho mejor, con un delantero más claro y fijo como Endrick. Y así lo supo mostrar el Real Madrid, que fue el claro dominador de la primera parte, sobre todo por la excelsa actuación de Arda Güler. El turco fue, desde el inicio del encuentro, quien se encargó de imponer el ritmo y sacar el balón desde el fondo. Además de orquestar la mayoría de las jugadas ofensivas de los blancos. En el minuto 17 arrancó la primera ocasión peligrosa: una salida desde el fondo, que terminó en un centro atrás de Vinícius para Fran García. El disparo de Fran fue tapado por el portero David Soria, pero ya iban avisando los merengues, que se estaban encontrando cómodos para atacar, cosa que esta temporada se ha visto muy pocas veces.

Y si había alguna duda sobre el joven centrocampista, esta se disipó en el minuto 21. Una contra iniciada por un toque sutil de Brahim que Vinícius llevó con gran inteligencia, culminó en un pase atrás que Brahim no pudo rematar. Sin embargo, la jugada continuó, y desde la frontal apareció Arda, quien disparó un latigazo seco con la pierna derecha que Soria no pudo detener. Imparable. Un golazo que hacía justicia a la buena primera parte del equipo. A los 31 minutos, tras una pared perfecta entre Vini y Endrick, el ex Palmeiras disparó con el interior, pero fue detenido por Soria, aunque el balón avanzó lentamente hacia la portería y estuvo a punto de cruzar la línea. Sin embargo, Djené intervino con un despeje agónico para evitar lo que ya parecía un gol cantado.

BAJÓN DE NIVEL, PERO CON AGUANTE

El Real Madrid salió del vestuario con la idea de cerrar el partido, pero el Getafe no lo permitió. Sin embargo, el cambio de Ancelotti en el descanso, con Camavinga sustituyendo a Alaba, modificó el esquema defensivo, colocando a Tchouaméni como central. La idea era darle más músculo al mediocampo, pero la jugada no resultó como esperaba. Con el francés fuera de su zona, el equipo perdió fluidez a la hora de sacar el balón limpio, y los locales, con cambios de Bordalás, comenzaron a presionar con mayor intensidad. Los de azul empezaron a ganar metros, a incomodar la salida de los blancos y a acercarse con peligro.

En el minuto 63 Bellingham entró por Endrick y Vinícius pasó a la punta, pero la claridad de la primera mitad se desvaneció. En el 66, el brasileño tuvo una oportunidad clara, pero su remate se fue por encima del larguero. El Getafe, por su parte, creció con el paso de los minutos. Arambarri, en el 70, tuvo una oportunidad clarísima, pero su disparo se fue desviado. A pesar de los cambios, el Real Madrid no logró calmarse. En el 77 Ceballos entró por Güler, pero los cánticos de la grada contra él hicieron detener el partido. Los azulones apretaron, y a pesar de los intentos por salir a la contra, el equipo se quedó con 10 tras la lesión de Camavinga en el minuto 89. Con los locales buscando el empate a balón parado, Courtois apareció como un muro, salvando al equipo en los últimos compases. El conjunto merengue resistió y se llevó los tres puntos, con más sufrimiento del que esperaba, pero con la victoria asegurada en el derbi.