Marcelo y lo difícil que es decir 'adiós'
Marcelo ya avisó durante la celebración del 35º título de Liga tras vencer al Espanyol: "Quiero seguir en el Real Madrid", dijo para sorpresa de todos. Ayer, Sergio Quirante confirmó la intención del brasileño de continuar al menos una temporada más en el Santiago Bernabéu. Asimismo, el diario AS asegura que Ancelotti no vería con malos ojos la renovación del '12' madridista por un año más.
Gran parte del madridismo, entre el que me incluyo, ha reaccionado con incredulidad a estas últimas informaciones. Marcelo lleva cuatro años sin ser titular: en 2018, le comió la tostada Reguilón; y desde 2019, Ferland Mendy ha sido el titular indiscutible en el lateral izquierdo. Teniendo en cuenta que el carioca ya no está para jugar al más alto nivel y que tiene uno de los salarios más altos de la plantilla, su renovación supondría un acto de caridad para una de las mayores leyendas del club.
Marcelo debería saber mejor que nadie que una retirada a tiempo es una victoria. Otras leyendas del Real Madrid, como Íker Casillas o Raúl, tardaron demasiado en decir adiós y se fueron por la puerta de atrás. Que el mejor lateral izquierdo de la historia 'merengue' quiera seguir estirando el chicle en lugar de marcharse por la puerta grande es triste. Pero más triste sería si el club da su brazo a torcer y renueva a un jugador solo por su pasado.