Bellingham suma una nueva exhibición en el Mundial en la victoria por 3-0 de Inglaterra a Senegal
Inglaterra es, junto con Países Bajos, Argentina y Francia, una de las selecciones ya clasificadas para los cuartos de final del Mundial de Catar. El Real Madrid estará muy atento a la Copa del Mundo, más aún a una Inglaterra donde continúa brillando Jude Bellingham. En la victoria en los octavos de final por tres goles a cero ante Senegal, Bellingham participó en dos de los tres tantos de los británicos. En el primero asistió a Jordan Henderson para abrir el marcador, y en el segundo fue el que robó la pelota en campo propio, condujo hasta el contrario para ceder a Phil Foden y que este asistiera a Harry Kane en el segundo. Bukayo Saka, otro de los jugadores relacionados (tímidamente) con el Real Madrid, puso el tercero.
BELLINGHAM ES EL LÍDER
Bellingham es uno de los indiscutibles en la Selección que comanda Gareth Southgate, a pesar de que apenas tenga 19 años. Nadie le discute el puesto, y la edad poco dice en un jugador que tiene alma de líder. El mediocampista del Borussia Dortmund marcó el primer tanto de los ingleses en el Mundial en la goleada ante Irán por 6 a 2, y sigue mostrando su enorme potencial, ahora, también en la fase eliminatoria.
En el primer gol de Inglaterra ante Senegal pasó el balón a Jordan Henderson para que anotara, pero la mejor asistencia fue en la celebración, cuando reivindicó la figura de uno de los capitanes de los 'Three Lions' abrazándose a él y señalándolo ante la grada de los aficionados ingleses. En anteriores encuentros, el jugador del Liverpool recibió críticas, y ha tenido que ser un jovencísimo Bellingham el que saque la cara por él. En el 75' fue sustituido para guardar fuerzas para los cuartos de final ante Francia.
Put some respect on his name. @JHenderson pic.twitter.com/XKe2uWAuIf
— Jude Bellingham (@BellinghamJude) December 4, 2022
Antes, una muestra de rabia juntando cara con cara con Henderson, jugador de un Liverpool que también tantea al del Dortmund. Se dijo que los alemanes no iban a establecer un precio por él hasta que finalizara el Mundial, sin duda una gran estrategia por parte de una directiva que ya sabía de lo que era capaz su futbolista en una cita tan trascendental como una Copa del Mundo.