Decisión más que arriesgada, pero la confianza es máxima
No es un rumor, es una gran certeza después de las declaraciones de Carlo Ancelotti hace 12 horas: "La plantilla está cerrada". Resulta cuanto menos curioso asumirlo, pero el Real Madrid, el club más exigente del mundo, ha pasado de considerar el fichaje de Leny Yoro como "generacional" y muy necesario, a no fichar a absolutamente nadie para el centro de la defensa. A todos se nos vienen a la cabeza ciertas imágenes del año pasado cuando Tchouaméni y Carvajal tuvieron que formar la pareja de centrales en algunos partidos. Uno de ellos, ante la revelación Girona.
Puede parecer un contexto extremo, pero el Real Madrid nos ha acostumbrado a situaciones ciertamente surrealistas. Por ejemplo, la de despedir al segundo máximo goleador de tu institución y no fichar a ningún '9'. Eso sucedió hace solo un verano cuando el sustituto de Karim Benzema fue Joselu Mato. La jugada, eso sí, no pudo salir mejor. Que se lo pregunten al Bayern...
HAY QUE TENER SUERTE
Por muy bien que haya salido la apuesta de Joselu Mato como único '9' puro del Real Madrid, la verdad es que no hay ninguna garantía de que suceda lo mismo la próxima temporada. Sí, sobre el papel marcarán más goles por el fichaje de Kylian Mbappé, pero también encajarán más. Que haya un equilibrio se antoja imprescindible, pero no podemos obviar que jugadores como Jesús Vallejo o Tchouaméni no son centrales fiables. El segundo se adaptó bien a la posición, pero el primero, y siento decir esto, no jugó apenas la pasada campaña. Dicho esto, se reencarnará en la mejor versión de Sergio Ramos.
La confianza debe ser máxima después de haber ganado seis Champions League en las últimas 11 temporadas, pero cuesta creer que el equipo no se resienta al no fichar a otro central de garantías.