En Champions es otra cosa: la crónica del Real Madrid 2-0 Chelsea
El Real Madrid encarrila los cuartos de final de la Champions League con una gran victoria frente al Chelsea en el Santiago Bernabéu. Partido dominado de principio a fin por los madridistas, que en Europa son auténticas fieras. Los goles de Benzema y Asensio ponen de cara una eliminatoria que, eso sí, habrá que cerrar el martes que viene en Stamford Bridge.
CRÓNICA DEL REAL MADRID 2-0 CHELSEA
Después de las rotaciones frente al Villarreal, Carlo Ancelotti decidió no inventar y confiar en los mismos once futbolistas que le dieron el pase a la final de la Copa del Rey en el último clásico frente al Barcelona. Una alineación ofensiva que Carletto prefirió no tocar, después de lo bien que le salió en el Camp Nou, y que estuvo formada por Courtois; Carvajal, Militao, Alaba, Camavinga; Kroos, Valvede, Modric; Rodrygo, Benzema y Vinicius. Por su parte, Lampard sí que sorprendió dejando a Havertz en el banquillo y colocando a cinco defensas: Kepa; Reece James, Fofana, Koulibaly, Thiago Silva, Chilwell; Enzo, Kanté, Kovacic; Sterling y Joao Félix.
Planteamiento defensivo del Chelsea, buscando el contragolpe, que se pudo ver desde el inicio. Y es que, en los primeros compases, Joao Félix se plantó solo frente a Courtois. Afortunadamente, el buen trabajo de Militao achicando al final permitió que el tiro del portugués no fuera del todo preciso y el arquero belga pudiera despejar sin demasiadas complicaciones. Fue lo más destacado de unos primeros minutos en los que el árbitro, François Letexier, puso el listón muy alto con dos amarillas, algo dudosas, a Fofana y a Camavinga. El Real Madrid se fue asentando en defensa, sin dar opciones a los blues, antes de que Benzema pusiera el partido de cara.
Minuto 20 de juego, centro peligrosísimo de Carvajal directo al corazón del área, remate de Vinicius estirando la pierna, paradón de Kepa y gol a placer del francés aprovechándose del rechace y enviando el balón muerto directo al fondo de la red. Golpe en todo el mentón del Chelsea, que rápidamente intentó reaccionar. De hecho, los ingleses estuvieron a punto de empatar. Centro de Reece James, remate a bocajarro de Sterling y paradón descomunal abajo de Courtois pese a que el balón le pilló a contrapié. Despiste de un Real Madrid con la defensa muy adelantada y el control del juego. De hecho, los blues no volvieron a asomar por el área madridista en todo el primer tiempo, mientras los blancos sí que dispusieron de varias aproximaciones muy peligrosas con Vinicius, Benzema y Rodrygo deleitándose. No estuvieron finos de cara a puerta, con disparos fáciles para Kepa, pero la sensación de superioridad y de peligro fue constante hasta el descanso.
Tras la reanudación, el Real Madrid no bajó el listón y siguió acorralando al Chelsea. Al poco de empezar el segundo tiempo, Luka Modric estuvo a punto de marca un golazo desde lejos, pero su disparo con rosca se fue lamiendo la escuadra. Y a los blues les empezaron a crecer los enanos. Primero con la lesión de Koulibaly (por Cucurella) y después con la expulsión de Chilwell, quien derribó a Rodrygo en la frontal del área cuando este se marchaba sólo hacia la meta de Kepa. Se ponía aún más de cara el partido para los madridistas, que tenían muy controlado el choque.
Llegados al 70', Ancelotti decidió mover el banquillo, metiendo a Asensio y Rüdiger por Rodrygo y Camavinga. Piernas frescas que enseguida se notaron. Saque de esquina botado en corto, pase raso de Vinicius desde la izquierda hacia la media luna, donde Marco Asensio enganchó con rosca el balón, poniendo el 2-0 en el marcador. Al ver que el partido se le marchaba, Lampard decidió meter dinamita sobre el césped, dando entrada a Mount y Gallagher por Thiago Silva y Kanté. Pero no fue suficiente para frenar al rodillo merengue. Es más, Asensio estuvo cerca de volver a marcar con otro disparo lejano que acabó en el lateral de la red.
Finalmente, el tramo final del partido transcurrió con normalidad y sin grandes ocasiones, salvo un cabezazo de Benzema, tras un despeje de Kepa, que se fue rozando el larguero, y un disparo de Mount que taponó Rüdiger de manera providencial. Tchouaméni y Ceballos entraron al campo por Modric y Kroos, ovacionados, para ayudar en la contención y seguir ayudando al equipo a defender el resultado con el dominio del balón. Resultado que no se movió y que deja la eliminatoria encarrilada para el duelo de vuelta en Londres. La próxima cita del Real Madrid será el próximo sábado (21:00 h.) en el Estadio Nuevo Mirandilla frente al Cádiz. Y el duelo de vuelta de los cuartos de final frente al Chelsea será el martes 18 de abril a las 21:00 h. en Stamford Bridge.