Bellingham: "Es mi oportunidad de ser parte de la historia del Real Madrid"

Jude Bellingham afronta su primera temporada como jugador del Real Madrid. Y lo cierto es que se le nota entusiasmado a raíz de las declaraciones que está dejando estos últimos días.

"¿Fichar por el Real Madrid? En primer lugar, la motivación detrás de esta transferencia. Quiero estar en un club que sea un aspirante a títulos y quiero intentar ayudar al equipo y al club a ser tan grande como lo ha sido todo este tiempo", comienza explicando Bellingham. "Esta es mi oportunidad de ser parte de la historia del club y eso llegará pronto, porque sé que el club quiere ganar y yo quiero ganar, así que espero que suceda. El club es grande y es una fantasía cuando lo piensas, pero cuando lo sumas, el proyecto que tienen, fue realmente importante para mí dar este paso porque es el lugar adecuado para mí", señala.

"¿La presión? Me presionaron en todas partes. Tenía 15 o 16 años cuando comencé a jugar en el primer equipo con Birmingham y sentí que había una presión como ninguna otra, así que en cada etapa de mi carrera esa presión aumentó", confiesa Bellingham.

UN INGLÉS PARTICULAR

Por otra parte, Bellingham reconoce que su carrera deportiva está lejos de ser la habitual en un futbolista inglés: "Cuando estoy lejos de la selección, observo las carreras de los otros jugadores, pero eso es algo de lo que estoy muy orgulloso. Debido a los riesgos que he tomado, y tal vez dure mucho tiempo, solo trato de tomarme las cosas en serio. He tenido una experiencia completamente diferente para la mayoría de los jugadores jóvenes, especialmente los ingleses. Mi carrera me ha llevado a tres países diferentes sin haber jugado nunca en la Premier League, por lo que es completamente diferente", reconoce.

"¿Si estoy pendiente de la ventana de fichajes? Para ser honesto, mi futuro está hecho y el de mi hermano está hecho, y realmente no podría importarme menos. Solo estoy tratando de disfrutar del fútbol de mi hermano y del mío. A los demás, les deseo lo mejor", sentencia Bellingham.