Anadolu Efes 80-103 Real Madrid: Yabusele y Campazzo conquistan Turquía

Los blancos vencieron con mucha solvencia en una cancha muy complicada ofreciendo un papel prácticamente inmejorable en todas las facetas
12.10.2023 21:20 de  Diego Rivero Mosqueda   ver lecturas
Yabusele, Real Madrid
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Yabusele, Real Madrid
© foto de Federico Titone/BernabeuDigital.com

El Real Madrid venció ante Anadolu Efes con un show en todos los cuartos y con varias figuras destacadas. Guerschon Yabusele firmó unos primeros diez minutos de libro, mientras que Facundo Campazzo y otras figuras como Vincent Poirier ofrecieron un nivel muy alto en todas las facetas del juego. Por otro lado, el juego en ataque y la carga del rebote ofensivo fueron claves para realizar un 'outclass' a los turcos, que no tuvieron prácticamente opciones.

El partido comenzó de la mejor manera posible, con un gran triple de Fabian Causeur, aunque Shane Larkin respondió inmediatamente con otro en la siguiente posesión. La fiesta de lanzamientos exteriores se hizo notar, y Yabusele sumó dos más de forma consecutiva desde el frontal. El juego directo del Real Madrid, sumado al acierto en triples (uno más del francés), y a la carga en el rebote ofensivo, desesperó a Anadolu Efes. Eso sí, el escolta turco fue el único que encontró su tono para no dejar escapar a los blancos en el marcador. El más destacado del cuarto, sin duda, fue Yabusele, que tuvo unos minutos inmaculados en el tiro, con un 100% de acierto en sus 14 puntos. La amenaza ofensiva de los madridistas no tuvo respuesta en los locales, muy perdidos en el partido, aunque despertaron tímidamente con dos lanzamientos exteriores consecutivos, a los que se sumaron varias pérdidas de los jugadores de Chus Mateo, y el parcial se cortó de forma abrupta hasta solo vencer de cuatro puntos.

El juego del primer cuarto se desvaneció por completo, y los turcos empataron con una comunión perfecta entre grada y jugadores. En cualquier caso, el nivel de intensidad subió un par de peldaños en los locales, y el Real Madrid se hundió poco a poco. El salvador, como no, fue Facundo Campazzo, que leyó la defensa local a la perfección y comenzó a sumar puntos consecutivos. Mario Hezonja, que comenzó un poco dubitativo, enmudeció al Sinan Erdem con un triple desde la frontal que dio respiro a los blancos, aunque inmediatamente después falló uno Causeur, que podría haber dado una mayor ventaja a los suyos. El croata, de hecho, anotó un lanzamiento más desde más allá de 6'75, y las sensaciones mejoraron pasito a pasito. Así finalizó el segundo periodo, con la ventaja blanca impoluta, y un juego mucho más parecido al de los primeros siete minutos de encuentro.

El triple de Causeur inauguró el tercer cuarto, y una recuperación de Yabusele que finalizó en un buen mate aumentó la ventaja ostensiblemente. El sistema de juego en la ofensiva cambió con respecto a anteriores minutos, y la carga en la zona dio un buen resultado, pues Edy Tavares se hizo grande, y Ante Zizic no pudo ofrecer un buen papel ante el caboverdiano. Además, las capturas aportaron varios puntos para aumentar la renta. El escolta francés mejoró sus sensaciones anteriores, y sirvió de ejecutor desde el triple. En cualquier caso, el golpe encima de la mesa del Real Madrid se hizo notar en todos los aspectos del juego, con un Efes muy errático, pues solo Rodrigue Beaubois y Darius Thompson se presentaron a jugar. Vincent Poirier volvió a cancha tras su pequeña lesión en la muñeca, y le sirvió para sumar un par de puntos que le devolvieron el ritmo ofrecido durante el partido.

Los últimos diez minutos se antojaron como un mero trámite para ambos equipos, pues Anadolu Efes se encontró muy fuera tanto física como psicológicamente del partido. Eso sí, sin Campazzo los blancos bajaron mucho el nivel, y los turcos anotaron varios puntos consecutivos que hicieron saltar pequeñas alarmas. Tuvo que entrar el argentino para mejorar al Chacho Rodríguez, que no tuvo su día, y enseguida comenzó el Real Madrid a carburar. Los madridistas se empezaron a gustar, y Poirier cerró un alley-op de la mano de Sergio Llull, que, con menos presión en cancha, ofreció un papel mucho más limpio. En cualquier caso, estos últimos minutos continuaron la tónica del encuentro: dominio blanco. Así se cerró la contienda, con la entrada de Eli John Ndiaye y la suma de más de 100 puntos en uno de los feudos más complicados de toda la Euroliga.