El VAR solo gusta cuando va en contra del Real Madrid

El último comunicado del Real Madrid sobre los árbitros cayó como una bomba sobre el resto de clubes de LaLiga. Alguno llegó a señalar que atentaba contra el fútbol español y que ese es precisamente el objetivo del conjunto blanco. Como si nadie se hubiera quejado nunca, las críticas sobre la entidad merengue cobraron un carácter nunca antes visto, ni siquiera cuando se destapó el caso Negreira. Además, se habló de que no era más que un intento de los madridistas por presionar al estamento arbitral antes del derbi.

Pues precisamente en el duelo ante el Atlético se vio que no, que nada más lejos de la realidad. El penaltito de Tchouaméni puso en evidencia que esta temporada se están dando muchos errores en contra del Real Madrid. En la clasificación de LaLiga sin los fallos del VAR, los blancos tendrían 6 puntos más que ahora, siendo el equipo más perjudicado por el videoarbitraje en lo que va de curso.

El club tiene todo el derecho del mundo de quejarse, porque lo hacen todos y porque las imágenes y los datos son evidentes y manifiestos. ¿Acaso no se quejó Laporta tras el arbitraje en Getafe? Y casualmente, desde entonces, el Barça ha sido capaz de recortar 5 puntos a los blancos, no exento de polémica como la del último partido en Sevilla. ¿Casualidad?

Pero no, no oirán al resto de clubes quejarse de las palabras de Laporta, de los errores en contra del Madrid o a favor del Barcelona y del Atleti... Solo escucharán quejas cuando es el equipo de Ancelotti el que alza la voz y el que pone el grito en el cielo por un sistema que todos repudian, pero que todos defienden cuando afecta a los merengues. No quiero ni imaginar qué hubiera pasado si es Lino el que pisa ligerísimamente a Tchouaméni en el área de Oblak. ¡Cuánta hipocresía!