CRÓNICA | Un error arbitral y un ataque espeso sentencian al Real Madrid
Decidió innovar Carlo Ancelotti frente al Villarreal colocando a Valverde en el lateral derecho, manteniendo a Asensio en el centro del campo y a Rodrygo y Vinicius en las bandas. A Hazard le tocó banquillo de nuevo, al igual que a Lucas, quien sigue sin convencer a Carletto para el lateral diestro. Militao, Alaba y Nacho, de lateral izquierdo, completaron la defensa; Modric y Casemiro volvieron al medio y Benzema se mantuvo en punta junto a los brasileños.
Con todo ello, el Real Madrid y el Villarreal protagonizaron un bonito intercambio de golpes con acercamientos peligrosos en ambas áreas. Courtois tuvo que intervenir milagrosamente tras una buena jugada de Danjuma, cuyo disparo duro raso lo rechazó el belga de manera brillante. Mientras, el conjunto blanco lo intentaba con un buen Rodrygo haciendo daño por la derecha y obligando a Rulli también a intervenir. No obstante, la jugada más clara la tuvo Nacho, quien en una estupenda acción individual se plantó en el área y fuera derribado por Albiol. Ni el árbitro, ni el VAR vinieron punible una acción bastante clamorosa que provocó el enfado de todo el Santiago Bernabéu. Justo después, Danjuma volvió a avisar contra jugada peligrosa, pero su disparo se fue bastante desviado. Finalmente, con una pitada ensordecedora para el trío arbitral, el encuentro llegó al descanso con empate a cero en el marcador.
El segundo periodo comenzó con un cambio en las filas del Real Madrid con la entrada de Camavinga por Rodrygo. El brasileño estaba siendo el mejor, pero el técnico italiano quiso blindar el centro del campo y adueñarse de la posesión con un centrocampista más y Rodrygo fue el sacrificado. Sin embargo, el equipo siguió atascado y sin inquietar al Villarreal con la dupla Benzema-Vinicius desconectada y el medio campo sin ideas. Solo Militao pudo marcar tras un remate de cabeza en plancha que pasó cerca del poste. Por eso, Ancelotti aprovechó para añadir más artillería, dando entrada a Hazard por Modric.
El dominio del balón era del Madrid, pero las ocasiones claras seguían sin llegar. El submarino amarillo se replegó, esperando a los madridistas a la contra. Rubén Peña pudo marcar al contraataque, pero se encontró con un Nacho imperial. El partido llegaba al tramo final y los merengues no lograban acorralar a su rival, que despejaba cada balón antes de que llegara a zonas peligrosas. Finalmente, reparto de puntos que seguro sabe a poco a un Real Madrid que estuvo bien atrás, pero espeso en ataque, y que seguro se acordará del error arbitral en la jugada de Nacho. Los blancos no pueden aprovechar la derrota del Atlético, aunque seguirán líderes en solitario. Próxima cita ante el Espanyol en Cornellá.