La diferencia entre Vinicius y el resto del mundo
El martes, ante la Atalanta, Vinicius demostró una vez más por qué es el mejor futbolista del mundo y por qué mereció ganar el Balón de Oro hace mes y medio.
El brasileño protagonizó una primera parte en Bérgamo realmente gris. Estaba claro que estaba lejos del cien por cien en lo que a su estado físico se refería. Recién salido de la lesión, Ancelotti no dudó en apostar por él en el once titular. Y, pese a que antes del descanso su actuación entraba dentro de la lógica para un jugador recién salido de la enfermería y entre algodones, acortando plazos. Pero Vinicius no es un futbolista cualquiera.
Es por ello por lo que el '7' del Real Madrid apareció cuando más se le necesitaba. Con 1-1 en el marcador, aprovechó un afortunado rebote para cazar el balón y firmar el 1-2 que dio aire al equipo blanco. Por si fuera poco, un par de minutos después se inventó una asistencia desde su campo para que Bellingham encarrilase la victoria. Dos chispazos de genio en dos minutos para certificar una victoria importantísima. Eso es lo que hacen los genios. Eso es lo que hace el mejor futbolista del mundo.